¿Qué podemos esperar de “Back to Black”, el biopic de Amy Winehouse?

El proyecto de una película sobre Amy Winehouse flotaba en el aire incluso antes del resurgimiento del biopic musical gracias al éxito de “Bohemian Rhapsody” en 2018 y, solo un año, después, “Rocketman”. Ya en 2015 se hablaba seriamente de un proyecto protagonizado por Noomi Rapace (la Lisbeth Salander sueca, entre otras cosas), al parecer seria admiradora de la cantante de “Rehab”. “Ha sido una gran parte de mi vida; en momentos cruciales, fue como un ángel cuando no me encontraba en una buena situación”, declaró la actriz a ‘The Guardian’ en 2017, cuando la película aún parecía posible. “En mi casa tengo un cuadro de cuatro metros de largo que me hizo un artista sueco. Tiene cuervos y la letra de ‘Back to Black’”.

Precisamente así, como ese clásico álbum y clásica canción, se llama el biopic de la artista que sí ha salido adelante, no con Rapace sino con Marisa Abela, revelación de la serie sobre jóvenes tiburones financieros “Industry” (2020-). Llegará a los cines británicos el 12 de abril, cuando quedarán solo unos meses para que se cumplan (el 23 de julio) trece años de la muerte de Winehouse por intoxicación etílica. Para verla en España tendremos que esperar al 28 de junio, pero mucho antes, el 14 de febrero, los amantes de las biografías cinematográficas de artistas musicales se podrán deleitar con “Bob Marley: One love”, protagonizada por el carismático y cada vez más versátil Kingsley Ben-Adir.

Equipo de cierta confianza

De acuerdo, no se han devanado los sesos para dar título al filme: “Back to Black” fue, así es, el título del álbum que en 2006 encumbró a Winehouse como nueva realidad del soul/R&B retroactual; un ejercicio de tradición renovada que sumaba a los influjos de Billie Holiday el punch de una producción filo-hip hop. Y, sin embargo, podemos esperar momentos de inspiración o exploración psicológica en esta película. De entrada, está dirigida por Sam Taylor-Johnson, que antes de la medio masacrada “Cincuenta sombras de Grey” (2015) obtuvo buenas críticas con otro biopic musical, “Nowhere Boy” (2009), sobre los días de adolescencia de John Lennon. Como en aquella, ha contado como guionista con Matt Greenhalgh, al que debemos también el libreto de la excelente “Control” (2007), de Anton Corbijn, sobre el legendario Ian Curtis, cantante de Joy Division.

Para Taylor-Johnson, además, esta película parece algo casi personal. “Mi conexión con Amy comenzó cuando deje la universidad y me movía por el creativamente diverso barrio de Camden”, explicó en un comunicado. “Conseguí un trabajo en el legendario club KOKO, y si cierro los ojos aún puedo oler cuando puesto del mercado, cada tienda vintage, cada calle… Unos años después, Amy compuso sus honestas y dolorosas canciones mientras vivía en Camden. Igual que conmigo, se convirtió en parte de su ADN”.

Papeles más y menos agradecidos

Según todas las informaciones, “Back to Black” recorrerá desde los inicios de Winehouse en la escena jazz del norte de Londres a la grabación del álbum titular y el consiguiente éxito popular y de premios. Pero del tráiler se deduce que también se abordarán sus problemas de adicción o el acoso de los medios. “No compongo canciones para ser famosa”, se oye decir a la Amy ficcional en el tráiler estrenado hace dos semanas. “Compongo canciones porque no sé qué haría si no lo hiciese. Quiero que la gente se olvide de sus problemas con solo escuchar mi voz”.

También del mismo avance se deduce la posibilidad de ver a Marisa Abela hacer, como en “Industry”, un gran trabajo: su talento expresivo no parece conocer límites. Y según explicaba “The Guardian”, la actriz de Brighton se ha tomado muy a pecho el desafío: ha aprendido a cantar a la perfección (clases durante tres meses) y tocar la guitarra y no ha tenido problemas en bajar de peso para acercarse a la imagen de Winehouse.

Corresponde a Jack O’Connell (“Invencible”, “’71”) la menos agradecida labor de dar vida a Blake Fielder-Civil, el que fuera su marido entre 2007 y 2009 y quien, según el documental “Amy” (2015), la introdujo en las drogas duras. Eddie Marsan (“El secreto de Vera Drake”, “Happy, un cuento sobre la felicidad”) interpreta al padre de la artista, Mitch, tantas veces puesto en cuestión. Lesley Manville (última princesa Margarita de “The Crown”) encarna a su abuela Cynthia.

Lo sofisticado y lo manipulado

Sobre Winehouse se habían producido ya varias películas documentales, la más importante de ellas la citada “Amy”, de Asif Kapadia, muy criticada por Mitch Winehouse, en parte porque no le dejaba en muy buen lugar. En ella le veíamos descartar la rehabilitación cuando el alcohol dejaba por primera vez a Winehouse en el hospital. O cómo cuando visitó a su hija en su retiro de desintoxicación de Santa Lucía en 2009, lo hizo acompañado por un equipo de vídeo para rodar un documental.

Los herederos de la artista han respaldado plenamente “Back to Black”, lo que invita a pensar en una lectura quizá menos crítica. ¿Qué podemos esperar de este biopic? Lo sofisticado, pero también lo ligeramente manipulado.

Foto: Focus Features