Paul McCartney

Las mejores canciones de Paul McCartney: éxitos y clásicos

Descubre las canciones más icónicas de Paul McCartney, desde clásicos de The Beatles hasta éxitos en solitario que han dejado huella en la historia de la música.

| Por Diego Rubio

Los próximos 9 y 10 de diciembre Paul McCartney regresa al WiZink Center de Madrid dentro del Got Back Tour para celebrar con el público español sus casi 70 años de trayectoria desde que inventara lo que hoy entendemos como pop junto a los Beatles. Toda una vida dedicada a la canción, que repasamos, aunque sea imposible, recopilando las que a nuestro juicio son las mejores, tanto en solitario, con Linda o con Wings. Una fiesta de perfección para calentar motores y, sobre todo, gargantas.

10. “Live And Let Die” (1973)

En 1972, Albert R. Brocoli y Harry Saltzman tenían claro que querían a Paul McCartney para el entonces próximo opening de James Bond. Macca leyó la novela de Fleming y en apenas una tarde escribió lo que terminaría siendo “Live and Let Die”. Con su estructura bifronte, como el propio Bond, al mismo tiempo seductor y violento, el tema se convirtió en el más exitoso de la franquicia hasta la fecha, capturando perfectamente las atmósferas revolucionarias que respira una película que también se mete en los pantanos del voodoo. Supuso también el reencuentro de McCartney con George Harrison, que arregló la sinfónica, tras la triste disolución de The Beatles.

9. “Little Lamb Dragonfly” (1973)

Una de las grandes églogas pastorales de McCartney, “Little Lamb Dragonfly” se desenvuelve siempre contemplativa, expansiva y naturalista, haciendo del “la-la-lá” su fuerza motriz y marcando uno de los mejores momentos de “Red Rose Speedway”. La historia de cómo un cordero se volvió libélula (con todas las interpretaciones que pueda tener eso), con el tiempo ha llegado a convertirse en una especie de himno vegetariano.

8. “Uncle Albert / Admiral Halsey” (1971)

El primer número 1 en EEUU del McCartney post Beatles es un collage sonoro de ideas geniales, tanto en lo armónico como en lo melódico como en lo detallístico, y es que a lo largo de sus nueve secciones el genio británico pasa por distintos tempos, enlaza brillantemente progresiones y contextos y, sobre todo, deja claro que es capaz de componer pop más allá de toda norma y ley, sin perder por ello ni un ápice de su naturaleza irresistible.

7. “Every Night” (1970)

Otra clase de Macca en la estructuración de canciones pop, limitándose a ulular el estribillo y convirtiendo el principio de cada estrofa en el verdadero centro gravitatorio del tema. Perfección pop y esperanza en el amor y la familia tras los últimos años con el Fab Four, convertido todo en una personal elegía por una juventud que se escapó demasiado rápido quizá, pero que estaba lista para abrazar una de las madureces más largas (y saludables) del pop.

6. “Dear Boy” (1971)

Más clases, que de esto va un poco este top, esta vez sobre armonización: Paul le canta a Linda, su entonces esposa, lo feliz que es de tenerla, y entre los dos decoran con sus voces esta oda catedralicia al amor que poco a poco va creciendo, incendiándose por dentro (como el corazón más enamorado) con ese piano vibrante, hasta disolverse en el aire. Perfección.


5. “Band on the Run” (1973)

La canción titular del tercer álbum de Paul McCartney and Wings, inspirada en George Harrison y con tres partes claramente diferenciadas, demostrando la pasión de Macca por el pop de alma progresiva, marca el paso de un disco que buscó recuperar el pulso comercial. Lo consiguió, no sin movidas por el camino: la mayoría de las sesiones de grabación tuvieron lugar en Lagos y les valieron un enfrentamiento directo con Fela Kuti, que les acusó (aunque los guiños sonoros recuerden más a la música japonesa que a la africana) de apropiacionistas. La orquestación, después, la puso Tony Visconti, que venía de trabajar con T. Rex.


4. “The Back Seat of My Car” (1971)

Más oleadas enfrentándose en naumaquia, otro collage brillante con ecos en “Live and Let Die” en el que secciones rockeras interrumpen abruptamente la belleza de una orquesta, mientras todo se conduce inevitablemente a una catarsis de pura pasión pop. La carretera siempre fue una inspiración para McCartney, y en parte por eso su música está siempre en movimiento, pero aquí también es fácil escuchar a los Beach Boys.


3. “Temporary Secretary” (1980)

Probablemente la canción más extraña de Macca, un ejercicio de composición en el que se pone en la piel de un hombre que reclama una secretaria temporal sobre un secuenciador desquiciado y fuera de tono que se repite en loop para formar el patrón rítmico. En su momento no fue muy comprendida, pero a día de hoy es una de las pruebas más evidentes de la apertura de miras de McCartney como compositor, capaz de hacer cosas quizá no adelantadas a su tiempo, pero sí a cualquier sombra musical propia. Macca siempre le ganará al reloj.


2. “Maybe I’m Amazed” (1970)

Qué vamos a decir: una de las mejores melodías de la historia del pop, mostrando al mundo las virtudes de McCartney en solitario inmediatamente después de la disolución de los Beatles y declarando su amor incondicional por Linda, que lo acompañará durante los mejores años de su trayectoria en solitario, a solas o con el abrigo de los Wings. “Maybe I’m amazed at the way you love me all the time / Maybe I’m afraid of the way I love you”: qué bueno es dudar siempre de si estás dando todo lo que puedes (y más) por la persona que amas.


1. “Monkberry Moon Delight” (1971)

Una canción espacial y futurista que sin embargo no parece tal cosa sobre una maravillosa bebida parecida a un milk shake. Las armonías están plagadas de referencias a su propio trabajo tanto previo como posterior y a su idea de entender las canciones, de repente te sueltan un ritmillo con la boca mezclado a la perfección sin caer en la cacofonía, y un lick de guitarra da vueltas alucinado para llevar el tema a una especie de febril psicodelia de postín. Todo mientras McCartney lo da todo a grito pelao’ inspirándose en Screamin’ Jay Hawkings, que luego la versionó. Círculos cerrados.






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